Actualmente existe una controversia en muchos centros de reproducción asistida a la hora de decidir si se tiene que transferir un solo embrión o más de uno. Ambas opciones tienen sus beneficios y riesgos, aunque, a día de hoy, parece que se tiende cada vez más a la transferencia de un único embrión.
Las preguntas que llevan haciéndose durante muchos años la mayoría de centros de fertilidad es: ¿ transferimos un solo embrión o más de uno?, ¿cuándo debemos priorizar la transferencia de un único embrión?, ¿realizamos double (DET) embryo transfer a D+3 o single (SET) embryo transfer a D+5? Te explicamos los pros y contras respecto a si transferir uno o más embriones.
Consecuencias del embarazo múltiple
La Sociedad Europea de Reproducción Humana y Embriología (ESHRE; por sus siglas en inglés) es el máximo exponente a nivel europeo en el ámbito de la reproducción asistida y la embriología, y ha manifestado recientemente que la verdadera medida del éxito es la concepción de un bebé sano, sin llegar al extremo de considerar la gestación general como una consecuencia adversa a la FIV. No obstante, las gestaciones múltiples conllevan un mayor porcentaje de nacimientos prematuros y de bajo peso al nacer junto con un ligero aumento de la mortalidad perinatal cuando lo comparamos con las gestaciones únicas.
Asimismo, en los casos de gestación múltiple, es más frecuente que la madre padezca anemia o un incremento de la presión arterial durante el embarazo, que pueda dar lugar a preeclampsia, una enfermedad que afecta a la salud de la madre. También existe un mayor riesgo de malformaciones, abortos y pérdidas fetales, y la tasa de prematuridad es muy elevada: un 75% de los partos se producen antes de la semana 38 de gestación y un 30% antes de la 36. Además, es mayor el riesgo de insuficiencia placentaria, retraso del crecimiento fetal y las hemorragias post-parto, así como también son más frecuentes las náuseas y vómitos durante el embarazo, junto con un incremento de la probabilidad de parto mediante cesárea.
El embarazo múltiple puede ocurrir de manera espontánea, y entonces no hay nada que permita evitarlo. En este caso es importante incrementar los controles y las medidas preventivas necesarias para asegurar que el parto llegue a término en las mejores condiciones.
¿Y si podemos elegir?
De forma natural, la incidencia de gestaciones múltiples espontáneas es de aproximadamente 1 de cada 85-90 nacimientos. No obstante, en los últimos años, se ha producido un incremento de considerable de embarazos múltiples en países desarrollados, debido en gran parte a los tratamientos de reproducción asistida. España es uno de ellos.
¿Por qué siguen realizándose transferencias dobles a pesar de las indicaciones de las Sociedades científicas y los resultados de los estudios? Porque hay mayor probabilidad de conseguir el embarazo con la transferencia embrionaria de dos embriones que solo uno. Si nos ponemos en el lugar de la pareja que lleva largo tiempo buscando familia sin lograrlo, y que ha invertido un esfuerzo económico y sobre todo emocional muy importante en el proyecto de llegar a ser padres, es lógico que en la mayor parte de los casos se decanten por la opción múltiple.
El problema es que la mayoría de las mujeres no tienen una percepción realista de esos riesgos, creen que todo el proceso de seguimiento del embarazo y el parto está muy controlado y piensan: “ante la posibilidad de quedarme embarazada de gemelos o no quedarme, opto por la opción que, en teoría, ofrece más probabilidades, sean cuáles sean los riesgos”. Pero en ciclos de FIV con ovocitos procedentes de donantes se ha comprobado que la diferencia en la tasa de éxito en términos de gestación y de parto entre transferir uno o dos embriones es mínima: 45-47% frente a 50-55% mientras que los beneficios de reducir una gestación múltiple (o triple) y evitar así todos los problemas que se pueden derivar son más que evidentes. Otra cosa ocurre cuando hablamos de esterilidad secundaria, ahí ya sin la presión del deseo de ser padres, la mayor parte se decide por un solo embrión.
En cualquier caso, es la autonomía de los pacientes quién predomina a la hora de elegir si se transfiere uno o más embriones. Y será el médico especialista en reproducción quién debe basar su elección y su recomendación en las características específicas de la mujer y/o pareja infértil que está tratando, su historial y en la calidad y número de embriones disponibles.
En Conceptum Fertilidad siempre te recomendaremos la mejor opción para ti y para tu futuro bebé. ¿Tienes dudas sobre tu fertilidad o sobre cuándo iniciar tu proyecto reproductivo? Contáctanos y resuélvelas.
